Municipalidad agradeció las bendiciones para la comuna en su aniversario 121

Vecinos y funcionarios municipales asistieron a la misa celebrada por Colina.

La Municipalidad recordó los 121 años de vida administrativa con una misa en la Parroquia de la Inmaculada Concepción. Si bien la historia del otrora villorrio agrícola en las afueras de Santiago se inició antes de la época de la Colonia, Colina tomó las riendas de su futuro con la Ley de Comuna Autónoma (1891), convirtiéndose en una ciudad pujante con más del 70 por ciento de los vecinos contentos de vivir en la comuna.

Cuando llegaron los españoles la historia de Colina comienza a escribirse en los manuscritos, pero no será hasta mediados del siglo XX que la comuna inicia un periodo de crecimiento que no se ha detenido. “Muchas autoridades han dejado su esfuerzo para que la comuna sea lo que es hoy, una comuna que se proyecta al futuro cada día más demandante”, recordó al Alcalde Mario Olavarría.

Para los veteranos de Colina es todo un tema recordar cómo era la comuna hace unos 50 años, cuando no había luz eléctrica, el único taxi lo ofrecía un vecino de apellido Chávez y apenas 122 casas contaban con agua potable. “El progreso desde que llegue hasta ahora es bastante -53 años- y tenemos la idea de que esto va a seguir progresando porque el ímpetu que tomó la comuna no creo que pare”, aseguró Waldo Valenzuela, vecino que ha visto como muchos el desarrollo de Colina.

Los años pasan, la estación Colina dejó de existir y al parecer el tren recogió a la comuna rural en uno de sus viajes para llevarla en el carro del progreso. Los últimos veinte años se ha triplicado el crecimiento, imponiendo un desafío mayor y enfocando a la Municipalidad en la misión de entregarle calidad de vida a los vecinos con colegios que destacan a nivel nacional, servicios de salud inclusivos y áreas verdes para todos los vecinos.

En el tránsito a la modernidad las tradiciones se han conservado, continuando con manifestaciones culturales centenarias y cultivando las riquezas de las costumbres criollas.

La celebración cerró con el esquinazo brindado por el Grupo Folklórico Talhuen con estudiantes del Colegio Francisco Petrinovic que integran el Taller Extraprogramático de la Corporación de Educación.

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