Alumnos del Colegio La Puerta y el Liceo Esmeralda aprenden sobre panadería y pastelería.

Por cuarta vez el Colegio La Puerta se adjudicó fondos del Gobierno Regional para desarrollar talleres que contaron con la asistencia de la Fundación Humaniza.

Cerca de treinta alumnos serán capaces de acceder a oportunidades laborales relacionadas con la gastronomía como ya lo están haciendo algunos. Sin embargo, el trasfondo tiene relación con hacer del colegio un lugar más entretenido para evitar la deserción escolar y otros problemas.

Alumnos de tercero y cuarto medio del colegio La Puerta y del Liceo Esmeralda formaron el grupo mixto que aprendió en el taller a preparar todos lo necesario para un banquete, “pero más importante que estudiarlo, es aumentar el autoestima de estos niños y evitar la deserción escolar”, explicó la directora ejecutiva de Humaniza, MarciaTabak.

“Ese es un punto álgido aquí en Colina, porque en octubre empieza la cosecha y los niños empiezan a trabajar”, agregó.

Las nuevas competencias adquiridas también pueden ser utilizadas para iniciar un emprendimiento. En septiembre se inició el taller y meses después eran capaces de realizar diferentes tipos de preparaciones.“Me ha servido harto, le ayudo a mi mamá a hacer tortas, panes, de todo”, contó uno de los alumnos del taller, Benjamín Monasterio.

Este proyecto tiene el propósito de mejorar el acceso a las oportunidades a jóvenes vulnerables y les entrega a la vez valores como el respeto, la ética y la responsabilidad.