Infraestructura comunal resiste los efectos del frente de precipitaciones de junio
El cruce vehicular del sector Peldehue – La Huaca se recuperó en tiempo récord, y se resolvió rápidamente la situación de las 19 familias cuyos hogares fueron afectados por las lluvias.
Las lluvias que cayeron sobre la zona centro sur de Chile entre la tarde del jueves 22 y el sábado 24 de junio también tuvieron importantes efectos en Colina, que la Municipalidad salió rápidamente a enfrentar; de esa manera, y a solicitud de la alcaldesa Isabel Valenzuela, se actuó con sentido de urgencia para minimizar todo lo posible el daño a la infraestructura de la comuna y a los inmuebles de las familias.
Con este actuar, el balance final tras el frente de precipitaciones fue positivo, con daños a la infraestructura únicamente en los cruces al lecho del Río Colina en los sectores La Huaca – Peldehue y Esmeralda – Santa Filomena. En el primer caso, el cruce se recuperó para el tránsito vehicular y de personas en tiempo récord, de manera de conectar a la comunidad de este sector de la comuna.
“El mismo domingo 25 se terminaron los trabajos de recuperación del cruce La Huaca, así que no queda sino felicitar a las funcionarias y funcionarios municipales que estuvieron en terreno para que las familias de este sector no quedaran aisladas. Con respecto al cruce de Esmeralda hacia Santa Filomena, estamos esperando que se normalice el cauce del río para que, con la misma velocidad, recuperemos este paso”, afirmó la alcaldesa Isabel Valenzuela.
La jefa comunal también agradeció el esfuerzo de las funcionarias y funcionarios municipales que llegaron con ayuda a las 19 familias que resultaron damnificadas por las lluvias: “Ya está resuelta la situación de estos hogares que se vieron afectados por el frente, gracias a que nuestros equipos municipales estuvieron en terreno desde el primer momento”.
El llamado que la municipalidad hace a la comunidad es a mantener las medidas preventivas para evitar los efectos negativos de las lluvias en los hogares, como la limpieza constante de canaletas y sumideros de aguas, corte de ramas que puedan desprenderse por el viento, verificación de los sistemas de agua potable, electricidad y estufas para que funcionen adecuadamente, y contar con kits de emergencia a mano.